Por Vladimir Turró
Periodista Independiente
La
Habana. El no tener dinero para comprar un trozo de carne de cerdo para la cena
de fin de año, es algo que a los cubanos les pone la cabeza mala, lo cual genera, casi siempre, una oleada de violencia
callejera, con la esperanza de sacar algún provecho, para pasar este día a lo
grande.
A
pesar de los supuestos cambios de la estructura y las bases de la economía
cubana, el dinero sigue perdido, además, los altos precios, explican la
dificultad para adquirir los alimentos.
Producto
de esta alza de precios, y la poca circulación de efectivo, algunos jóvenes,
han puesto sus esperanzas en la vida fácil, asaltando a personas en lugares
oscuros de la ciudad, donde los despojan de todas sus pertenencias, incluso,
hasta de las ropas que traen puestas, para después venderlas en unos cuantos
pesos convertibles (cuc), los cuales, posiblemente, sean destinados, por los
bandidos, a las festividades navideñas.
Luis
Manuel García Vergara cuenta que fue asaltado por tres sujetos, cuando viajaba
en un auto de alquiler de color verde sobre las 8:00 pm del día 11 de noviembre,
que en combinación con el chofer del carro, quien fingió una rotura del mismo
en una calle oscura cercana a la avenida Boyeros, le propinaron un machetazo en
el brazo izquierdo, despojándolo de todas sus pertenencias.
Esther
Concepción Valdés, quien se desempeña como cajera en un centro de recreación
nocturno, tambien sufrió un ataque, a la salida de su centro laboral, donde
después de arrebatarle tres cadenas de oro, fue violada sexualmente por cuatro
individuos de la raza negra, quienes le causaron daños por lo cual, en la actualidad, no puede tener
hijos.
Oscar
Luis González sufrió daños severos en el cráneo, luego de ser golpeado, con una
piedra, en la cabeza, para despojarlo de su bicicleta, cuando transitaba, sobre
las 10:00 pm, por la avenida Vento.
Laymaris
La O Caballeros fue asaltada, a plena luz del día, por dos jóvenes, que de
manera violenta, le arrancaron una cadena fina de oro, lo cual le produjo un
trauma psicológico, que le causa insomnio, por miedo a soñar con el suceso,
según dijo su mamá.
Imprimir Pagina
No comments:
Post a Comment