Por Vladimir Turró
Periodista Independiente
La
Habana. “No tenemos regulador ni balón de oxígeno, pero tranquilos, que se
resolverán”, esta fue la respuesta que pudo darle una enfermera del hospital “Salvador
Allende”, ubicado en el municipio Cerro, a los familiares de José Días Fonseca,
luego de haber sido hospitalizado de urgencia el 10 de Julio.
Después
de esperar por más de cuarenta y cinco minutos por la llegada de los servicios
de urgencias parar auxiliar a su padre producto de un enfisema pulmonar que se
le agravó, cuenta Raisa Días, que no fue el problema más grande que enfrentó,
sino, la situación que se desató ante la llegada al hospital.
Al
llegar al cuerpo de guardia del Hospital, la primera dificultad que encontraron,
según Raisa, fue la ausencia de los médicos, quienes habían salido a almorzar, dejando
a cargo de la consulta a la enfermera.
Al
aparecer los clínicos una hora después y luego de un extensivo papeleo, José
fue ingresado en la sala Julio Antonio Mella del Hospital. Ante la constante
falta de aire, los médicos indicaron ponerle oxígeno constantemente, pero una
cosa es lo que indiquen los médicos y otra es la disponibilidad del Centro Médico.
La
ausencia del balón de oxígeno y el regulador se prolongó por varios días, por
lo que según su hija, tuvieron que recurrir a la ilegalidad y conseguir por
unos 500 pesos cup balón y regulador.
Algo
parecido vivió Norma Fernández, residente del poblado del Cerro, quien llegó a
este mismo hospital en busca de atención médica.
Según
Norma, luego de largas horas de espera
para ser atendida por el médico de guardia, al final de la cita, este le
informó, que no podía indicarle ningún medicamento para la infección urinaria
que estaba padeciendo, producto de que no disponía de recetas medicas para la
compra de los antibióticos.